Durante la campaña de 2011, el entonces candidato Bauzá afirmaba tener el remedio para la legislatura que terminaba, como farmacéutico que es. Cuatro años después, es momento de sentarse y analizar si su tratamiento fue el acertado, es decir, de evaluar la gestión Bauzá.
Irónicamente, hemos conocido esta semana que la Audiencia de Palma admite a trámite una querella contra el aún President por su gestión con las farmacias. De hecho, no es el primer enfrentamiento judicial sobre este tema, pues los tribunales determinaron que su cargo público era compatible con la propiedad de una farmacia en Marratxí, y pese al esfuerzo de los suyos en cantar y tuitear a los cuatro vientos, que Bauzá es compatible, para la opinión pública su imagen se vio seriamente perjudicada.
Visitas al juzgado aparte, y visto que su mentor político fue a dar con sus huesos en la cárcel, es evidente que la campaña que empezó hace meses, hoy se intensifica. Tanto, que su partido incluso paga cuñas radiofónicas que anuncian la web de campaña, gestión Bauzá, por si alguien olvidaba el medicamento agresivo que ha aplicado en sus pacientes pacientes. Este error de estrategia puede que sea la gota que colme el vaso.
Si en 2011 la campaña ganadora fue la de Canviadors, hoy las oposiciones son las que piden cambios. Cambio de diagnóstico y de tratamiento. Además, se le ha dado un nombre a sus efectos, gestión Bauzá, cuyos efectos, lejos de garantizar un público fiel, pueden provocar que esa farmacia tenga que cerrar, mientras otras hacen caja. De hecho, esta es la mejor campaña que podría hacer a sus adversarios. Y es que hay cosas que no se aprenden en las facultades, ni las de farmacia ni las de comunicación.
(14 de febrero de 2015)
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Entrelíneas es una sección radiofónica del programa A vivir que son dos días Baleares, de la Cadena SER
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