En su ensayo Sobre la libertad, John Stuart Mill escribe que «La fatal tendencia de la humanidad a dejar de pensar en una cosa en cuanto deja de ser dudosa, es causa de la mitad de sus errores».
Esta semana, un diario local titulaba algo así como «Bauzá da inicio a la campaña electoral con una entrevista en IB3», un encuentro televisado entre amigos en el que solo la presentadora fue capaz de tensionar levemente el entrecejo del Presidente. Lejos queda, aunque no en el tiempo, aquella entrevista de Matías Vallés, en mayo de 2013. O las entrevistas en Madrid, acompañado por asesores y escoltas, cuyos gastos de promoción pagamos todos.
Pero el fondo puede más que las formas. Es obvio que el President no quiere preguntas incómodas, pues para eso ya tiene los plenos de cada martes o las ruedas de prensa. En el fondo subyace una oportunidad perdida, una campaña de marketing enfocada en medios afines y con entrevistadores cómodos, en la que incluso le plantearon si se marcharía después de su tercera legislatura como Presidente. Así de críticos fueron.
El desgaste de Bauzá no ha ido acompañado de propuestas estrella en los momentos oportunos, como los debates del estado de la Comunitat. El laissez faire, laissez passer llevado a la enésima expresión.
Tal vez el objetivo final de su partido sea dejar de pensar en el propio President, borrar el recuerdo de su primera legislatura, aunque los titulares del día después desmontaron la estrategia y nos recordaron a todos lo ridículo que suena decir que no ha existido ningún problema en la aplicación del TIL.
Puede que la mejor forma de ocultar algo no sea ponerlo a la vista, por mala que sea una entrevista.
(22 de noviembre de 2014)
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Entrelíneas es una sección radiofónica del programa A vivir que son dos días Baleares, de la Cadena SER.
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