A eso del mediodía, el viernes 13 (buena fecha) de septiembre apareció en mi feed una noticia curiosa: madre que reúne firmas para que en los colegios se enseñe a hacer la declaración de la renta. Treinta y una mil almas firmaron y seguro que cientos de miles estarán de acuerdo, sobre todo por ahorrarse el gestor y aprender a burlar la ley.
Al leer aquel titular, del que no pasé, pensé enseguida en Escuela de Ciudadanía. Los motivos para crear este proyecto son los mismos: nadie enseña a hacerla bien en la educación reglada obligatoria. Los planes de estudios no contemplan el Estado de Derecho, los fundamentos democráticos o los actores políticos, que deciden leyes como la del IRPF y otras muchas, como las que afectan a derechos fundamentales.
Es por ello que en los planes de estudios de Derecho se estudian antes materias sociopolíticas y Derecho Constitucional, y luego el Derecho Financiero y Tributario: por una relación de contingencia. Nos interesa saber cómo hacer la renta (yo lo estudié en el Máster en Dirección de Recursos Humanos) pero debería interesarnos también el escalón superior, quién lo decide, cómo y por qué. Pero eso es terreno tabú, casi como la educación sexual.
No se estudia el sistema político como antes no se estudiaba educación sexual… y luego venían los desastres
Sí, el sistema político no se estudia como tampoco se estudiaba educación sexual, y la gente iba aprendiendo a tientas, por convenciones sociales o experimentando a lo loco, y luego venían los desastres. La ignorancia de los fundamentos sociopolíticos es el caldo de cultivo para los populismos, la reversión y repetir la historia.
Que nadie piense que voy a reunir firmas para defender que se incluya esta materia, como intentó hacer Zapatero en su momento y que tantas ampollas levantó. No tengo tiempo que perder, ni ganas de perderlo. Mis energías van dirigidas a montar la plataforma con esos cursos y darles la difusión que merecen.
Ya vamos tarde.
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