Hace casi 8 años, en octubre de 2012, se me ocurrió poner en orden algunos recursos que consideraba útiles para estudiantes y profesionales de la Politología. Las ganas podían más que los escasos conocimientos en maquetación o diseño, y sólo había tenido contacto con el código cuando modificaba algunos aspectos de mi blog personal en Blogger. No me pregunten por qué, pero no me hacía gracia WordPress y pensaba que indexaría mejor en Google si lo construía en su propia plataforma. Es por ello que creé una página estática y en paralelo un blog, en el que iría publicando.
Estos dos sitios aún siguen abiertos y recibiendo visitas, aunque formalmente en marzo de 2014 creé un sitio independiente, en el que instalé un WordPress y una plantilla, volcando a mano el contenido que tanto me había costado picar pero, de nuevo, las ganas superaron a todo lo demás.
Gracias a las redes sociales, en las que poco a poco íbamos creciendo en seguidores, conseguimos generar un interés que, aunque muy reducido y limitado, servía para dar visibilidad a personas con inquietudes en la materia, que enviaban sus blogs para añadirlos al directorio, remitían sus artículos para tener una mayor difusión y compartían los contenidos. Todo esto sin tener ningún ingreso por publicidad ni el apoyo logístico de ninguna organización.
En paralelo a aquel proyecto, iban surgiendo otras ideas muy interesantes y necesarias en el ámbito de la ciencia política, como Debate21 de Edu Bayón, Ssociólogos o la posterior Cámara Cívica. La mayoría íbamos en la dirección de crear un espacio abierto a cualquier persona con interés, darle un altavoz y ofrecer contenidos originales, que luego se compartían en redes y conseguían un cierto impacto. También coincidió en el tiempo con la irrupción de politólogos provenientes de la Universidad en foros hasta entonces reservados para periodistas, como los debates de opinión. Pablo Iglesias ya despuntaba y Politikon o Piedras de Papel se convertían en webs de cabecera de muchos interesados por los asuntos públicos.
Poco a poco fui dedicando menos tiempo al proyecto, en parte porque había perdido el carácter novedoso y en gran parte porque mi vida personal y profesional ocupaban casi todo mi tiempo. En junio de 2015 finalmente tomé la decisión de aparcar aquella web, sobre todo porque al ocupar un cargo público, pensaba que debería restringir mis proyectos personales para no suscitar críticas de terceros, ni dar alas a quienes quisieran ver intenciones que no existían.
Desde entonces han surgido muchos más proyectos, creaciones transmedia, figuras influyentes en redes y un sinfín de productos mediáticos en los que la Politología estaba presente. Y siempre me quedó una espinita por no haber continuado con aquel proyecto, buscando colaboradores fijos y tratando de aportar contenido de valor, creando una asociación o quién sabe. Es por ello que me alegró muchísimo ver que en Balears ha surgido el grupo de politólogos creador de Passes Perdudes, un colectivo abierto a los análisis de terceros, relacionados con diferentes universidades y organizaciones, y que tienen mucho que aportar a escala autonómica, pero también global.
Hoy tenemos acceso a más Politología que cuando monté aquellos dos blogs tan modestos como prescindibles, contamos con redes sociales y apps que nos acercan a contenidos muy interesantes y hacen que siga dando vueltas a qué hacer con aquel proyecto. Y voy apuntando algunas ideas por si algún día.
0 comentarios