Escribió Josep Maria Colomer que «una decisión colectiva entre diversas opciones no depende necesariamente del número de personas que desean una opción más que otra, sino de quienes la aceptan como segunda o tercera preferencia».
Vamos a pensar en las prioridades del electorado ante las elecciones de mayo de 2015, y ahora veamos cómo son activadas semana a semana. El empleo es uno de los problemas más importantes, y esta semana conocíamos que según la EPA, Balears ha mejorado sus cifras de empleo a nivel cuantitativo, no así cualitativo. De hecho, incluso la ministra Báñez vino a vender esa mejoría, pero no rodeada de hoteleros, que son quienes más empleo dan en las islas, sino en el Parc Bit.
Por otro lado, la corrupción también preocupa al electorado, y esta semana entraba en la agenda otro nuevo caso de corrupción urbanística, con carácter más local. Tras el escándalo de la directora del SOIB y candidata del PP en Lloseta, esta vez el dedo acusador apunta al PSOE a través de su alcalde, que afirmó haber actuado “por el bien del pueblo”.
Decía el citado Colomer que «una decisión colectiva entre distintas opciones políticas puede depender de alternativas irrelevantes». Imaginen por un momento que la prioridad en los electores no sea el empleo ni la corrupción, pese a lo que digan las encuestas, y que estos temas no acierten a movilizar al electorado. Imaginen que el votante medio, conscientemente o no, priorice la cercanía del político, el lenguaje coloquial y el reconocimiento de que tal vez no baste una legislatura para llevar a cabo las reformas.
Puede que para actuar “por el bien del pueblo”, no haya que mirar solo las encuestas. Si es que la voluntad es movilizar, y no al contrario.
(31 de enero de 2015)
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Entrelíneas es una sección radiofónica del programa A vivir que son dos días Baleares, de la Cadena SER
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