«El homo politicus ya no es el único que propone una historia; están los medios de comunicación, los partidos de la oposición y los internautas que (…) interactúan con sus relatos. A veces hasta consiguen hacerles sombra y logran imponer otro relato.»

Christian Salmon

 

Bauzá compatible.

Así lo ha reconocido el Tribunal Superior balear, vilipendiado por algunos cuando dicta sentencias desfavorables y adorado cuando insufla algo de aliento político, antes de que el Tribunal Supremo diga la última palabra.

Se puede gobernar una botica al tiempo que se gobierna una Comunidad. Sí, se puede. Ése es el relato hoy. Y si él puede, todos podemos. Es una historia de vida en toda regla, llena de batallas, traiciones y una suerte de sueño americano adaptado a la idiosincrasia balear, a lo nostro. Si todavía viviéramos en la era de la comunicación tradicional, ese sería el saldo positivo de lo ocurrido esta semana.

Pero hoy los tiempos son muy otros. Bauzá es compatible para gestionar sus asuntos privados y los asuntos públicos, de una ciudadanía con la que parece no ser compatible. De hecho, no era compatible con su partido hasta la purga interna, y los cañellistas, que se hacen valer con frecuencia, le han recordado en varias ocasiones que esto no es Valencia, para lo bueno y para lo malo.

El relato del hombre hecho a sí mismo se apaga. Objeto de un desgaste furtivo, Bauzá apura los últimos cartuchos de un relato que ya pocos compran. De los cuatro tomos de la legislatura, a muy pocos lectores les han gustado los tres primeros libros, y es muy difícil que un capítulo bueno salve una obra. Quién sabe cuántos acabarán la colección entera.

(14 de junio de 2014)

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Entrelíneas es una sección radiofónica del programa A vivir que son dos días Baleares, de la Cadena SER.

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